21 de septiembre de 1844

Por segunda ocasión ocupa el cargo. Ya había sido presidente sustituto del general Santa Anna del 4 de octubre de 1843 al 4 de junio de 1844. Pero esta vez sólo permanecerá en el puesto por poco más de dos meses, hasta el 6 de diciembre, cuando será depuesto por el Congreso y perseguido y exiliado por el gobierno de José Joaquín Herrera.

Valentín Raymundo Canalizo Bocadillo nació el 12 de enero de 1794 en la ciudad de Monterrey. En 1811 se enlistó en el regimiento realista de Celaya, combatió a los insurgentes y en 1821 se unió al Plan de Iguala ya como teniente coronel. Fue ayudante de José Joaquín Herrera durante la campaña de Jalisco.

Ya con el grado de teniente coronel se unió a los planes de Casa Mata en 1823 y de Jalapa en 1829. A partir de entonces siguió lealmente a Santa Anna en sus aventuras políticas y militares.

En 1831 fungió como vocal del Consejo que sentenció a muerte a Vicente Guerrero, después fue ascendido al grado de general. En 1833 atacó Oaxaca bajo la bandera de religión y fueros.

En los siguientes años, se destacó en las luchas contra los liberales.

Algunos de los cargos que ocupó fueron los de Comandante General del Departamento de Oaxaca; Prefecto de Cuernavaca; Teniente gobernador del Estado de México y Gobernador del mismo departamento.

En 1842 fue gobernador del Departamento de Puebla durante el periodo centralista.

Regresará de Cádiz en 1846 y ocupará la secretaría de Guerra y Marina (1846-1847) en el gobierno de Valentín Gómez Farías. Durante la guerra de despojo de los Estados Unidos contra México, Canalizo luchará al mando de cuerpos de caballería en algunas acciones en Cerro Gordo y en el Valle de México en las garitas de Niño Perdido y Santo Tomás. También enfrentará el motín de los “polkos” en la Ciudad de México.

Retirado a la vida privada, morirá el 20 de febrero de 1860 en la ciudad de México.

Doralicia Carmona. MEMORIA POLÍTICA DE MÉXICO