Enero 4 de 1998

El presidente Ernesto Zedillo destituye al secretario de Gobernación, Emilio Chuayffet, por su actuación respecto a la matanza de Acteal, Chiapas.

El 22 de diciembre pasado, decenas de paramilitares vestidos de negro llegaron a Acteal, donde estaban refugiados miembros del grupo civil “Las Abejas”. En cinco horas, los paramilitares mataron a 9 hombres, 21 mujeres y 15 niños, a quienes mutilaron y desgarraron los vientres de mujeres embarazadas. Una hora después del inicio de la matanza, testigos que lograron huir avisaron del hecho a Gonzalo Ituarte, vicario de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, quien informó al secretario del gobierno del estado, Homero Tovilla Cristiani. Los vecinos avisaron lo que sucedía a la Seguridad Pública y pese a estar a unos cientos metros de distancia de la masacre, no intervino.

Chuayffet negó que el gobierno federal tuviera responsabilidad por razones de acción u omisión. Sin embargo, Raúl Vera, obispo coadjutor de San Cristóbal, dijo que el 18 de octubre le había enviado una carta en la que le advertía del “ambiente de violencia”.

Después, Chuayffet admitió haber recibido el aviso, y comentó: “Es muy difícil, prácticamente imposible, que todos los hechos de violencia de este género se evitaran en el mundo a partir del simple conocimiento del ambiente de violencia”.

El 23 de diciembre, Ernesto Zedillo condenó el ataque y anunció que el gobierno federal se haría cargo de la investigación; arrestaron a unos 46 presuntos agresores y a Jacinto Arias Cruz, presidente municipal de Chenalhó, acusado de instigar la masacre. Así, el gobernador de Chiapas, Julio César Ruiz Ferro y el Secretario de Gobernación, Emilio Chuayffet, “renuncian” en medio de un clima de acusaciones.