Washington, marzo 25 de 1861
ALARMADO ROMERO INFORMA SOBRE LA ACTITUD EXPANSIONISTA DE LOS CONFEDERADOS
Excelentísimo señor ministro de Relaciones Exteriores México
Excelentísimo señor:
Poco tengo que agregar ahora a lo que, sobre los proyectos que los partidos de este país tienen respecto de México, he dicho a V. E. en mis notas anteriores.
Los demócratas del sur siguen manifestando que no tratan de disimular siquiera sus planes de extenderse hacia México e introducir la esclavitud en nuestro territorio. El párrafo III de la sección 3ª del artículo IV de la Constitución decretada por el Congreso de Montgomery previene lo siguiente:
Los estados confederados pueden adquirir nuevo territorio y el Congreso tendrá facultades para legislar y establecer gobiernos para los habitantes del territorio que pertenezca a los estados confederados y que esté fuera de los límites de los varios estados y les puede permitir, en el tiempo y modo prevenido por la ley, que se organicen en estados para ser admitidos en la confederación. En todo ese territorio la institución de la esclavitud de los negros, como ahora existe en los estados confederados, se removerá y protegerá por el Congreso y por los gobiernos territoriales y los habitantes de los varios estados confederados y de los territorios tendrán derecho de llevar a tal territorio los esclavos que posean legalmente en cualquier estado o territorio de los estados confederados.
Esta disposición no podía ser más terminante. La confederación del sur podrá aparentar ahora muy buenos sentimientos y disposiciones hacia nosotros, mucho respeto por los derechos de la República; pero sólo será mientras se sistema sobre bases sólidas, pues su objeto constante y su deseo más ardiente, que tratará de llevar a cabo más o menos tarde, es, como tengo dicho a V. E. y no me cansaré de repetirlo, tomarse todo el territorio que pueda de México Para establecer en él la esclavitud.
Una correspondencia escrita en Galveston y publicada en el Herald de Nueva York, asegura que la convención del Estado de Texas había enviado un comisionado a Chihuahua para solicitar la agregación de aquel estado a la confederación del sur. Un parte telegráfico publicado en el Tribune de la misma ciudad, dice que los estados del sur se preparaban a ocupar el Istmo de Tehuantepec en virtud de privilegio que tiene la compañía de Louisiana. Esto último me parece enteramente improbable, y sólo lo menciono a V. E. para manifestarle que en el Istmo de Tehuantepec es en donde se van a encontrar en oposición más directa los intereses de las dos confederaciones y tal vez lo que va a ocasionar mayores dificultades a la República.
Respecto de la política que la administración republicana se propone seguir con México, he dicho a V. E. cuanto ha llegado a mi noticia y he podido conocer sobre el particular. Ahora, pues, sólo me referiré a un parte enviado de esta ciudad al Herald de Nueva York, en que se asegura que este gobierno piensa negociar con la República un tratado en que se garantice la independencia de México, para cuyo proyecto se solicitará la cooperación de la Inglaterra y la Francia. Esto, siendo cierto, viene a confirmar mis informes anteriores.
En hoja suelta remito a V. E. el parte mencionado, un editorial que con motivo de él publicó el mismo diario y los demás impresos que se citan en esta nota.
Tengo la honra de reproducir a V. E. las seguridades de mi muy distinguida consideración.
Dios, Libertad y Reforma.
Matías Romero
PROYECTOS DE ANEXIÓN DE LOS SUREÑOS RESPECTO A MÉXICO
Washington, abril 8 de 1861
Excelentísimo señor ministro de Relaciones Exteriores México
Excelentísimo señor:
Tengo la honra de llamar la atención de V. E. hacia una carta del corresponsal en Charleston del Herald de Nueva York, fechada en aquella ciudad el 21 del próximo pasado marzo, en que dicho corresponsal, refiriéndose a una conversación que tuvo con Mr. Pickens, gobernador del Estado de la Carolina del Sur, asegura que este señor dijo, hablando de los proyectos que tiene la confederación del sur, que en el caso de que el norte quisiera colonizar a México, el sur se uniría a España para dividirse entre ambos a la República y para asegurar a aquella potencia la posesión de la isla de Cuba, discurriendo largamente sobre este tema; todo lo que V. E. verá en la tira del Herald que le remito.
Aunque puede considerarse éste como uno de tantos proyectos que se publican diariamente aquí para entretener la actividad de la opinión pública, pero que carecen de todo fundamento, tiene la circunstancia de ser atribuido a uno de los funcionarios principales de los estados separados y de no haber sido hasta ahora desmentido, además de que la forma en que se publicó copiando las mismas palabras del gobernador Pickens hace temer que no sea una cosa enteramente supuesta.
Yo creo de mi deber hacer llegar a V. E. la noticia de tal proyecto, dejando que el buen juicio de V. E. le dé el crédito que merezca.
Si son ciertas las noticias recibidas de Santo Domingo y si, como yo creo, el gobierno de S. M. C. se propone restablecer en cuanto le sea posible su antigua preponderancia en las Indias Orientales, el rumor adquiere más visos de probabilidad.
Tengo la honra de reproducir a V. E. las seguridades de mi muy distinguida consideración.
Dios, Libertad y Reforma.
Matías Romero
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