México, 1936.

EL GOBIERNO DE MEXICO ANTE LOS PROBLEMAS SOCIALES Y ECONOMICOS
LA CUESTION RELIGIOSA. - RESPUESTA DEL EJECUTIVO AL MEMORIAL DE LAS CLASES PATRONALES. - LA SITUACION ECONOMICA MEJORA

La publicación de estas informaciones tiene por finalidad inmediata dar a conocer con rapidez y eficacia, en el extranjero, la verdad sobre algunos de nuestros problemas políticos y sociales que, por su magnitud y trascendencia, interesan a la opinión internacional. Además, las mismas informaciones se difunden ampliamente dentro de nuestro propio país, porque nunca está de sobra el conocimiento pleno de la obra gubernamental, y porque se desea que el pueblo de México sepa cómo se presentan ante el mundo sus grandes problemas, y pueda contribuir a su mejor orientación.

LAS CAMPAÑAS ANTIRRELIGIOSAS NO COMPETEN AL GOBIERNO

PARA cerrar la información relativa a la jira presidencial, reseñada en nuestro folleto anterior, ofrecemos en el presente las declaraciones que el señor Presidente de la República hizo a un grupo de maestros jaliscienses que lo entrevistaron, en la ciudad de Guadalajara, en relación con la política del Gobierno frente a la cuestión clerical.

El objeto de la entrevista de los maestros fue el de plantear diversos problemas a la consideración del Presidente de la República, y entre otros el de las garantías que son necesarias para los maestros, en razón de las acechanzas y peligros que los rodean por la insensatez de gentes que arman brazos de inconscientes para mutilar maestros cuando no para arrancarles la vida.

El Presidente Cárdenas escuchó con gran interés la exposición que se le hizo al respecto y repitió las órdenes que ha dado a las autoridades dependientes del Gobierno Federal, para que sean protegidos los educadores.

Pero como no basta —dijo el Presidente— con la sola acción del Poder Público Nacional, cooperarán también las autoridades locales y las de los Municipios, con la fuerza pública de que dispongan y más directamente las comunidades agrarias consideradas ya como milicias auxiliares del Ejército y a las que directamente interesa proteger a los mentores de la niñez campesina.

Acerca de las diversas maniobras clericales en contra de la Escuela Socialista, el Señor Presidente Cárdenas dijo:

"Para destruir las resistencias que oponen los fanáticos movidos por los enemigos de la Revolución, es necesario que se organicen las colectividades revolucionarias. En las Entidades en que esto se ha llevado a cabo, dijo el General Cárdenas, la acción de los retardatarios es nula porque es al pueblo, y principalmente a las personas y grupos avanzados, a quienes compete la misión de combatir los prejuicios religiosos. Ya dirijo excitativas a todas las autoridades ejecutivas de la República, para que velen celosamente por el estricto cumplimiento de la Constitución y de las leyes que reglamentan el ejercicio de los cultos, pues allí, donde hay más lenidad en esta vigilancia, es donde más incuban las resistencias de los retardatarios. Pero el Gobierno no incurrirá en el error de Administraciones anteriores. El deber de una Administración revolucionaria como la actual, consiste en proveer lo necesario para la realización del programa de la Revolución, cuyos aspectos fundamentales son de carácter social y económico. El Gobierno pone su mayor esfuerzo, en consecuencia, en hacer que se realicen, en la estructura orgánica del país, las transformaciones sociales y económicas que ya están previstas en nuestro derecho, y para lo cual las mismas leyes establecen normas y procedimientos que es a los que se ajusta la conducta de los funcionarios públicos.
No es competencia del Gobierno emprender campañas antirreligiosas, con lo que no se consigue más que gastar estérilmente el esfuerzo de los servidores públicos, levantar resistencias y aplazar indefinidamente el cumplimiento de los postulados económicos y sociales, básicos para el bienestar del pueblo.
La acción de las masas organizadas en combate contra el fanatismo y en apoyo de la Escuela Socialista, es la mejor garantía para la. vida de sus componentes, para la de los mentores de la niñez y para la liberación social, económica y espiritual del pueblo."

 

II

ACTITUD DEL GOBIERNO ANTE LA CLASE PATRONAL

EL día 11 del corriente mes de marzo, una coalición de elementos de la Banca, la Industria y el Comercio, hizo publicar un memorial dirigido al señor Presidente de la República, General Lázaro Cárdenas, quien tres días más tarde dió a conocer su respuesta, en la que puntualiza nuevamente la actitud del Gobierno Mexicano ante los ingentes problemas del capital y el trabajo.

La respuesta dada por el C. Presidente de la República a los representantes de la Banca, de la Industria y del Comercio, es como sigue:

"Señores representantes de la Banca, de la Industria y del Comercio:

"Como Jefe del Poder Ejecutivo Federal, me he impuesto detenidamente del memorial que con fecha 11 de marzo en curso, y en representación de diversas agrupaciones patronales, me dirigieron ustedes para expresar sus puntos de vista tocante a la situación económica por que atraviesa el país.
"En ese documento presentan ustedes un cuadro de pesimismo que está lejos de corresponder a la verdad de la situación presente que impera en el país; afirman que no existe norma fija, ley en vigor, orientación definida y clara, y piden que este supuesto estado de anormalidad y perturbación permanentes, sea substituido por un programa y una legislación de netos lineamientos, no importa cuán avanzada sea la ideología en que se inspire; censuran el criterio revolucionario que imprimen a las leyes vigentes los órganos de autoridad llamados a interpretarlas, principalmente la Suprema Corte de Justicia de la Nación y las autoridades del trabajo; tachan de irracional la jurisprudencia en que se funda el carácter no obligatorio del arbitraje, en los conflictos obrero-patronales; atribuyen a tal jurisprudencia la multiplicación de los movimientos de huelga y a su vez presentan estos movimientos como causa de una desorganización en la economía, que acarrea, entre otras consecuencias, el alza de los precios; me advierten que no he escuchado la opinión de los elementos directores de las empresas con la misma frecuencia con que he prestado oído a los representantes de los sindicatos obreros; estiman que la producción es el resultado del esfuerzo que desarrollan en común el empresario y el obrero, y que el fin de la producción no es ninguno de esos factores, puesto que ambos son el medio para hacer llegar a los consumidores el mayor número de bienes al más bajo precio posible; opinan que no debe ser la capacidad económica de las empresas el límite de las reivindicaciones reclamadas por los trabajadores, sino que este límite ha de ser la capacidad económica de las masas; interpretan ustedes como un propósito, de la Administración Pública, que pretendiera rebasar el marco de sus atribuciones legales, la respuesta que dí en Monterrey, cuando me fue planteada la posibilidad de que empresarios fatigados de la lucha social se retiraran de las actividades económicas, en el sentido de que lo patriótico sería que, al efectuarla, las fábricas quedaran en manos del Gobierno o de los trabajadores en vez del paro de las fuentes de producción; enfáticamente declaran que no podrán entregar sus negocios porque creen tener una misión y una responsabilidad que cumplir y porque las leyes los amparan para conservarlos, como propietarios, o como administradores de bienes ajenos; estiman, de otra parte, que el derecho de propiedad se mina de raíz, al violarse los cánones legales y que existe un estado de conciencia que se singulariza por el menosprecio de las leyes, lo que pretenden ejemplificar citando los incidentes ocurridos en torno de una huelga reciente; asientan que el crédito agrícola no existe, que desapareció hace mucho tiempo y con él las empresas agrícolas de aliento; a pesar de su categórica declaración de colocarse al margen de cualquier connivencia política, se hacen solidarios de la especie que pretende mostrar los naturales reajustes de la economía, como el fermento de agitaciones comunistas; las reflexiones que en vista de ello formulan, preven perturbaciones violentas, desgarramientos y quizá el colapso de la actual estructura económica de México; y por fin, hacen conjeturas sobre las desastrosas consecuencias que a su juicio tendría el hecho de que las masas se desbordaran ciegamente.
''El escrito que a continuación contesto, contiene, en su parte final, un ofrecimiento de colaboración con el Gobierno, para mejorar las. condiciones de las clases proletarias; una protesta de cumplir las leyes vigentes con el mayor escrúpulo, y una demanda en el sentido de que autoridades y trabajadores también cumplan con la ley y que ésta se aplique con rigurosa igualdad.

 

LA INTERPRETACION REVOLUCIONARIA ES PLENAMENTE JURIDICA

"Existe una norma fija, una ley en vigor, una orientación definida y clara. La República vive dentro de un régimen de derecho, y ustedes mismos así lo reconocen cuando invocan en su apoyo la Constitución Política y sus leyes derivadas. No podrían citarse casos concretos en que una autoridad haya procedido violando la ley, sin que exista la debida reparación del daño cuando ésta ha sido exigida con apego a derecho.

"El Gobierno tiene una orientación definida y clara, puesto que por primera vez en la historia de nuestras Instituciones Políticas, apega sus actos a un programa, y el Encargado del Poder Ejecutivo de la Nación informa no sólo ante la Representación Popular, sino ante el pueblo mismo de la República, sobre las realizaciones que van lográndose periódicamente en el desarrollo de su gestión.

"Cuando impugnan ustedes la interpretación revolucionaria de la ley, concretamente se refieren a la legislación que informa las relaciones de los empresarios y sus asalariados. La legislación obrera, parte central del derecho creado por la Revolución, como todo cuerpo jurídico reciente, ha debido pasar, y en ciertos aspectos pasa todavía, por un período de aplicación que puede calificarse de experimental, por cuanto sirve para observar en la práctica las deficiencias que el legislador no alcanzó a prever.

"En estas condiciones, es natural que haya puntos de duda, y sólo a ellos se aplica un criterio interpretativo, pues todas las demás cuestiones se hallan expresamente resueltas en el texto vigente, y están al margen de las diferencias de opinión.

"Es pues, en los puntos dudosos únicamente en los que hay lugar a aplicar un criterio interpretativo. Y ese criterio, que es revolucionario, no implica arbitrariedad o injusticia, puesto que se apega a las más correctas normas de derecho.

"El concepto moderno de la función del Estado y la naturaleza misma de la legislación del trabajo, en amplitud universal, requieren que los casos de duda sean resueltos en interés de la parte más débil. Otorgar tratamiento igual a dos partes desiguales, no es impartir justicia ni obrar con equidad. La legislación sobre el trabajo, como es sabido, tiene en todos los países un carácter tutelar respecto de los trabajadores, porque tiende a reforzar la debilidad de éstos frente a la fuerza de la clase patronal, para acercarse lo más posible a soluciones de justicia efectiva.

 

NO DESTRUYE LAS NORMAS LEGALES, SINO QUE VIENE A DARLES FIJEZA

"Lejos de restar fijeza, precisión y permanencia a las disposiciones legales, la interpretación revolucionaria de sus puntos dudosos, viene a completarlas, siempre en vista al interés social, subsanando de este modo las deficiencias del legislador.

"Lo dicho, por cuanto a la justificación general del criterio revolucionario, como medio de interpretar los puntos discutibles de la legislación del trabajo. Pero en el caso de nuestras Instituciones, particularmente en el de nuestros tribunales, debe reconocerse que la aplicación de cualquiera otro criterio implicaría una notoria deslealtad a sus principios de origen, puesto que el orden existente nació de la Revolución.

"Debe tenerse presente que una de las preocupaciones mayores del Gobierno actual, ha consistido en recoger cuidadosamente el producto de la experiencia que el país ha ido viviendo, a través de la interpretación revolucionaria de la ley, para convertir las conclusiones ya probadas en la práctica —que van siendo jurisprudencia y derecho consuetudinario— en preceptos positivos que eliminen, dentro de lo posible y en lo porvenir, el recurso a la interpretación.

"En consecuencia, no es correcto afirmar que el sentido interpretativo revolucionario destruya las normas de la legislación y menos aún podrían citarse casos en que éstas hayan sido dejadas de aplicar, en una denegación de justicia, por los funcionarios que integran el Poder Judicial de la Federación. Como revolucionarios y como conocedores de la ciencia del derecho, jamás se han extendido hasta hacer nugatorios los derechos que las leyes conceden a todos los componentes de la colectividad, incluso los patrones, y han velado siempre por que ninguna autoridad viole las leyes con el pretexto de interpretarlas ni con otro alguno.

 

EL ARBITRAJE OBLIGATORIO DESTRUIRIA EL DERECHO CONSTITUCIONAL DE HUELGA

"La tesis de que el arbitraje de los tribunales obreros no es obligatorio en los casos de huelga, deriva de una interpretación estrictamente jurídica, hecha por los tribunales competentes, que jamás ha podido ser atacada con argumentos jurídicos por la clase patronal. Los tribunales han juzgado que la Constitución, al otorgar el derecho de huelga a los trabajadores y establecer también el arbitraje, no pretende plantear una contradicción irresoluble, sino garantizar un recurso, el de huelga, que es anterior a la ley, y fijar un procedimiento arbitral para los casos en que no se pone en movimiento la solidaridad de los trabajadores.

"Aplicar el criterio contrario, que es el sustentado por ustedes, sería tanto como nulificar el derecho de huelga, mutilando así en la realidad de los hechos, la Ley Fundamental del país que expresamente ve en los movimientos de resistencia, un medio de restablecer el equilibrio entre el capital y el trabajo.

"Como se ve, la interpretación revolucionaria respeta en su integridad el texto y el espíritu de la Constitución, mientras que la interpretación patronal, de admitirse, dejaría sin vigencia un precepto avanzado.

"No es exacto que la frecuencia de las huelgas en tal o cual período de tiempo y en determinadas regiones del país, corresponda a la tesis del arbitraje no obligatorio. Aunque fué hasta el año pasado cuando esta tesis se expresó jurídicamente, en la realidad de los hechos nunca ha sido obligatorio el arbitraje.

"Las huelgas son fenómenos propios del reacomodo de los factores de la producción. Se presentan cuando las justas aspiraciones de mejoramiento, que por una u otra circunstancia los trabajadores no pueden expresar, encuentran ambiente propicio para transformarse en demandas concretas. Si se resuelven con espíritu comprensivo y justiciero, a la postre producen beneficios a la economía en general.

"Es cierto que las agitaciones y las huelgas son molestas y causan alarma en el país; el Gobierno es el primero en reconocerlo así, pero no puede esperarse que el Poder Público, dentro de sus facultades, contribuya a temperarlas, mientras no tenga pruebas suficientes de que el sector patronal se apreste a respetar la ley.

 

NO HA HABIDO COOPERACION DE PARTE DE LOS ELEMENTOS PATRONALES EN LA OBRA CONSTRUCTIVA

"Y, no obstante las declaraciones de mi Gobierno, comprobadas en la práctica, de que ajustará todos sus actos a la ley, hasta hoy las autoridades no han tenido la cooperación ni de la industria, ni de la banca ni del comercio, a pesar de los propósitos que ustedes declaran.

"¿Con qué obras, con qué operaciones, con qué normalidad en los precios han contribuido estos tres sectores para mejorar las condiciones de vida del pueblo? ¿Cuáles han sido sus actos para reforzar ante la opinión pública la obra constructiva que actualmente desarrolla el Gobierno, en carreteras, en irrigación, en ferrocarriles, en educación, en salubridad?

"Mantenerse en una actitud de pesimismo y haciendo frecuentes, declaraciones alarmistas en lo público y en lo privado, no es ciertamente muestra de colaboración. Estas declaraciones y estas actitudes hubieran colocado al Gobierno de la Revolución en una situación difícil si no tuviera, como tiene, un programa y una tendencia, perfectamente definidos y claros.

"Rectifico la aseveración que hacen ustedes cuando afirman que la actitud del Ejecutivo se inspira en información unilateral.

"Jamás he dejado de escuchar los puntos de vista que han querido exponerme cuando lo han hecho en forma oportuna y debida los sectores patronales organizados, y les he dedicado atención en la medida de la importancia que sus exposiciones tienen para el país.

 

NO SE QUIERE QUE ABANDONEN SUS FABRICAS, SINO QUE NO ABUSEN DEL DERECHO DE PROPIEDAD

"Ciertamente sería de desearse que la producción tuviera por norte satisfacer las necesidades del consumo, a precios mínimos. Pero esto que ustedes presentan como una realidad, no es sino un término ideal, ya que dentro del actual período evolutivo de nuestro régimen económico, es todavía el lucro el único móvil de los industriales. Y tan es asi, que cualquier aumento de los costos de producción, lo cargan al precio de venta, como puede comprobarse con las palabras mismas del memorial que contesto, allí donde pretende señalar la capacidad económica de las masas consumidoras como el límite de las concesiones al trabajador.

"La decisión que ustedes muestran de no entregar sus fábricas, sus negociaciones o sus empresas, es la mejor prueba de que les rinden utilidades muy estimables, lo cual se contradice con el sombrío cuadro de bancarrota que en seguida describen.

"No es deseo del Gobierno que empresario alguno renuncie a sus derechos y entregue los elementos de producción que posee. Pero debe considerarse que, si bien esos elementas se encuentran bajo el dominio de personas determinadas, que te administran para su provecho, en un sentido más amplio y general, las fábricas, la propiedad inmueble, incluso el capital bancario, integran el cuerpo de la Economía Nacional; y el interés social se lesiona cuando los propietarios se abstienen de ejercer correctamente sus funciones, escudados en un concepto anacrónico de la propiedad

"Es entonces cuando el Gobierno, legítimo representante de los intereses de la sociedad, debe intervenir para evitar perturbaciones en la economía.

"Este es el sentido de la declaración que hice en Monterrey y que no vino sino a corroborar un criterio públicamente sostenido por mí, de tiempo atrás. No invité a los empresarios a que abandonaran sus negociaciones; contesté a un representante autorizado de los grupos patronales regiomonta- nos, cuando expresó la posibilidad de retira de aquellos patrones que se encontraban fatigados de la lucha social.

"Este punto de vista tiene apoyo en la Constitución General, que prohibe el paro arbitrario.

"Podría argüirse que en la misma forma reguladora debería el Poder Público, que no tolera la inactividad de medios de producción por retiro de los patrones, reprimir los movimientos de huelga. Pero es muy fácil descubrir la inconsistencia de este argumento. Las huelgas, si se mantienen dentro de la ley, y exigen prestaciones posibles dentro de la capacidad económica de las empresas, favorecen el interés social, porque ayudan a resolver el más grave de los problemas de México: la miseria de los trabajadores. Cuando rebasen el marco de la ley y de la capacidad económica de los patrones, entonces se considerarán perjudiciales los movimientos de huelga.

 

UN BOYCOT DE LOS PATRONES SERIA PROBLEMA DE CAMBIO DE PERSONAS UNICAMENTE

"Ni el posible retiro de industriales, ni la paralización del crédito privado, que ustedes creen entrever como probable, pueden tener otra importancia que la de un problema de personas. El negocio no está en la producción, sino en el mercado, en la demanda de bienes y de servicios. Si bancos e industrias existen, es porque el mercado permite lucrar. Una abstención, un boycot patronal, cualquiera que fuese su magnitud, reclamaría la intervención del Estado, par vías perfectamente legales, para impedir que la vida económica se perturbara. Y lo más que podría acontecer sería que determinados ramos salieran de la órbita del interés privado para convertirse en servicios sociales.

EL GOBIERNO PUEDE PROVEER A LAS NECESIDADES DEL CREDITO

"Así ha acontecido con el crédito para la agricultura organizada por la Revolución. Si bien los bancos usurarios prefirieron retirarse a dejar los privilegios que les otorgaban las antiguas leyes, y cumplir con la Constitución de 1917, con ellos salió ganando la agricultura nacional, porque el acaparamiento de la propiedad rural que aquellos bancos efectuaban en grande escala, tocó a su fin. En cambio, el Gobierno de la Revolución dedica veinte millones de pesos anuales a impulsar el crédito ejidal y no desatiende el que la pequeña y la mediana propiedad agrícola en explotación necesitan para su prosperidad. Con frecuencia insisten ustedes en que no harán ni harían oposición alguna a actividades del Régimen que están amparadas en preceptos legales debidamente establecidos. Naturalmente que es deseable, en interés de ustedes mismos, que así ocurra en lo sucesivo; pero en el caso reciente de la ley que estableció la obligación de pagar el séptimo día— ley cuya viabilidad económica fue cuidadosamente estudiada de antemano por el Ejecutivo, y cuya corrección jurídica es insospechable— no observaron ustedes la encomiable conducta que ofrecen, pues independientemente de los casos numerosos en que se ha tratado de eludir el cumplimiento de la nueva disposición, el comercio responde con un alza general de precios destinada a nulificar la importancia económica de la ley y a derogarla así prácticamente, obteniendo de paso un aumento ilícito en las ganancias.

ES FALSO QUE HAYA LEYES CONFISCATOR1AS EN EL ESTADO DE YUCATAN

"No se percibe por ninguna parte el espíritu de cooperación de ustedes, cuando llegan a hacerse solidarios de una información sabidamente tendenciosa, relativa a la acción del Gobierno de Yucatán.

"No puede creerse que exista serenidad en los elementos que redactaron el pliego que contesto, cuando llaman despojo a una ley expedida por las autoridades de Yucatán, declarando de utilidad pública la desfibración de henequén, precisamente porque los propietarios de plantas desfibradoras, negando todo principio de solidaridad social, determinaron boycotear todo el henequén procedente de plantíos ejidales. No sólo no existe incautación, sino que la propia ley establece las cuotas que los ejidos deben pagar a los hacendados por la maquila de sus pencas.

"Hasta los casos concretos que ustedes citan, dejan entrever poco deseo de estimar con justicia los hechos. La clausura de tres negociaciones con el pretexto de realizar un movimiento solidario dé huelguistas con una fábrica, fué oportunamente remediada por las autoridades competentes, como ustedes mismos lo reconocen, y no existe razón para atribuir la trascendencia que pretenden darle.

QUE CUMPLAN CON LA LEY LOS EMPRESARIOS Y SE EVITARA EL PELIGRO DE PERTURBACIONES

"Por cuanto a la apreciación general y con fundamento en datos innegables, puede afirmarse que no se justifica el pesimismo. Si se compara, guardando todas las proporciones, el estado económico de la República Mexicana con el de países análogos; si se cotejan las cifras estadísticas correspondientes a períodos anteriores con las del presente, un razonamiento sereno concluirá con estos elementos de juicio que hay recuperación y que no es infundado esperar una progresiva mejoría.

"Es cierto que un movimiento de violencia que desquiciara el orden establecido, sería funesto. Precisamente porque conozco, como revolucionario, en qué circunstancias se incuban las explosiones del sentimiento popular, recomiendo que la dase patronal cumpla de buena fe con la ley, cese de intervenir en la organización sindical de los trabajadores, y dé a éstos el bienestar económico a que tienen derecho dentro de las máximas posibilidades de las empresas; porque la opresión, la tiranía industrial, las necesidades insatisfechas y las rebeldías mal encauzadas, son los explosivos que en un momento dado podrían determinar la perturbación violenta tan temida por ustedes.

SE ACEPTA SU COLABORACION, PERO CONFORME A LOS DICTADOS DEL INTERES SOCIAL

"El Gobierno de mi cargo, después de puntualizar los hechos anteriores, declara a ustedes que no sólo acepta la colaboración que le ofrecen, sino que la ha venido demandando, al igual que la de los demás grupos sociales. Pero esa colaboración debe consistir en una actitud comprensiva, limpia de segundos fines, del proceso evolutivo que se opera, por imperativo histórico, en las condiciones sociales y económicas de nuestro país; en una acción que concurra con la del Poder Público, encaminada a resolver el máximo problema que tiene ante sí: redimir la miseria en que viven, a las grandes masas de trabajadores, colocándolas además en condiciones de civilización y cultura; en obrar con verdadero patriotismo y con un interés sincero de contribuir al desarrollo de la economía en beneficio de todos los que contribuyan a la producción."

III

LA SITUACION ECONOMICA ACTUAL ES MEJOR QUE EN AÑOS ANTERIORES

LA Secretaría de la Economía Nacional dió a conocer importantes cifras estadísticas, para demostrar que la situación económica de México es mucho mejor en la actualidad que en años anteriores; que han aumentado considerablemente las exportaciones de materias primas; que ha disminuido la desocupación de los braceros mexicanos, y que las industrias en general, tienen altas ganancias.

De acuerdo con las estimaciones que hace la Secretaría de la Economía Nacional, el panorama económico de la República, concretamente, es el siguiente:

1. La balanza comercial de México es bonancible. Las exportaciones en 1935 fueron de $750. 000, 000. 00; en 1934 de $644. 000, 000, 00; en 1933 de $365. 000, 000. 00.

2. La desocupación ha disminuido progresivamente, registrándose en 1932 un total de 378, 679 individuos sin trabajo hasta reducirse, en diciembre del año pasado, a sólo 182, 792, no obstante que la población de la República aumentó a 18. 218, 200 personas.

3. El índice de la producción de energía eléctrica, reflejo del progreso industrial de la Nación, llegó en enero de este año a un record nacional de 192. 000, 000 de kilovatios.

4 La inquietud de los trabajadores se debe a un reacomodo   de los factores básicos de la producción, capital y trabajo.

5 Fuertes utilidades económicas en 1915 obtuvieron las actividades industriales. 40 de ellas repartieron dividendos de un 16% a sus accionistas.

6 Es ilógica el alza de precios registrada en el período del 12 de febrero al 6 de marzo, alza que acusa un porcentaje que oscila entre el 13 y el 25% precisamente cuando es débil y apenas notorio el aumento de la capacidad adquisitiva de los trabajadores.

El informe de la Secretaría de la Economía Nacional, publicado por los principales periódicos de México, con fecha 14 de marzo del año en curso, es el siguiente:

En relación con ciertas versiones más o menos alarmantes, que últimamente han venido siendo lanzadas a la publicidad sobre la situación económica del país, esta Secretaría considera de interés público emitir una síntesis de los datos que tanto por conducto de la prensa diaria, cuanto por sus diferentes órganos, ha venido dando a conocer.

Estos datos revisten suma importancia, porque una vez reunidos y comentados en la forma que se verá después, dan una idea completa de la marcha de nuestra economía, y no la fragmentaria y, en consecuencia inexacta, que se tendría de conocerse nada más de una manera incompleta o dispersa.

LA BALANZA COMERCIAL

Siendo México un país productor y exportador de materias primas en gran escala, el hecho de que las exportaciones hayan ascendido en el pasado año a más de 750 millones de pesos, en tanto que en 1934 fueron de 644 y en 1933 de 365, en números redondos, basta por sí solo para demostrar que las versiones alarmantes no tienen razón de ser.

Es cosa evidente, que como resultado de circunstancias históricas anteriores que no se pueden modificar en breve lapso, las industrias extractiva están en su mayor parte controladas por capital extranjero y, por lo tanto, la balanza comercial del país no es en el fondo tan favorable como a primera vista parece.

Pero también es cierto que el auge en la explotación de nuestros recursos naturales pone en circulación importantes sumas de dinero y da ocupación a muchos obreros, como lo demuestran concretamente las estadísticas de hombres sin trabajo, que habiendo subido en marzo de 1932 a 378, 679 individuos, en diciembre del pasado año habían bajado a 182, 792, no obstante que en el primero de esos períodos la población de la República se calculaba que era de 17 millones y medio de personas, en tanto que en 1935 se apreciaba ascender a cerca de dieciocho millones doscientos mil individuos.

Además, todos los datos concretos de que se puede echar mano, comprueban que México va por un camino de progreso (o por lo menos de recuperación) económico. La industria en general, no solamente la de extracción de materias primas, avanza con paso firme. Durante el primer semestre de 1935 la exportación de esas materias alcanzó su grado más alto, a causa, entre otras cosas, del alza mundial del precio de la plata.

No obstante, la producción de energía eléctrica, que puede considerarse como un índice general de la situación económica, en particular de la industrial, ha registrado una tendencia ascendente durante todo el resto del año, y en el pasado mes de enero llegó a más de 192 millones de kilovatios, lográndose así un verdadero record nacional.

LAS UTILIDADES INDUSTRIALES

Y otras cifras semejantes podrían seguirse citando; pero no hay para qué cansar al lector. Basta seguramente traer a colación el criterio sustentado por el Banco Nacional de México, que en uno de sus recientes boletines dice textualmente: "quizá uno de los renglones que mayor aliento producirán a los lectores del Boletín, ha de ser el correspondiente a las utilidades industriales de 1935. Cuarenta y cuatro compañías han dado a conocer en los periódicos locales sus reportes, y relacionando los dividendos que se decretaron con el. capital de las empresas, resulta una utilidad, del 16 por ciento en cifras redondas sobre el capital invertido.

Tan bonancible situación de la industria fue determinada, tanto por el aumento del volumen de la producción, cuanto porque el pasado año, de acuerdo con los índices que, comenta el propio Banco Nacional de México, los precios de los artículos de consumo, ("no alimentos" y "artículos de hogar") subieron, y los de materias primas bajaron, con lo cual las utilidades aumentaron por doble concepto: la baja en uno de los renglones de los costos, y el alza de los precios de los productos elaborados.

EL AUMENTO DE LAS HUELGAS

El panorama de los datos oficiales no es, sin embargo, uniformemente halagador, pues no faltan ciertos factores negativos de importancia. Las huelgas habidas últimamente en diferentes regiones del país pueden comprenderse entre ellos. Pero no es conveniente juzgar esto de una manera superficial, ya que el aumento de esta especie de movimientos, es fenómeno que, sin excepción, se registra en los países del tipo del nuestro siempre que la economía, después de una coyuntura de crisis, entra en una recuperación, siendo, en términos generales, un producto de la economía capitalista misma; por lo tanto, la mejor salida que se puede buscar al recrudecimiento de las huelgas, no consiste en el empleo de medidas represivas, que en el mejor de los casos sólo aplazarían la cuestión, agravándola a la larga, sino en un reacomodo de los factores básicos de la producción, capital y trabajo.

Y esto es precisamente lo que en México está intentando hacer el Gobierno, por dos principales razones: primero, porque conoce las realidades económicas antes expresadas y, por ende, la capacidad de las empresas; y, segundo, porque sustentando un criterio eminentemente revolucionario, busca el mejoramiento de las masas trabajadoras y con él la ampliación de la capacidad de absorción del mercado interior, sin la cual sería absolutamente imposible pensar en el desarrollo de la industria nacional, toda vez que sería insensato pensar en que México se convirtiera en exportador de manufacturas.

EL ALZA DE LOS PRECIOS

Causa de mayores desniveles y malestar económicos que cualquier otro fenómeno, es el alza de los precios de menudeo de los artículos de mayor consumo, que en los últimos días ha alcanzado proporciones que sin exageración pueden calificarse de alarmantes. Del 12 de febrero pasado al 6 de este mes, diez artículos han registrado una alza que oscila entre el 13 y el 25 por ciento, en tanto que los otros han subido del 5 al 11, según detalle que en breve será dado a conocer.

Este fenómeno es tanto más injustificado o perjudicial para la economía del país, cuanto que se debe a ambiciones de especuladores sin responsabilidad, que se aprovechan de la situación, invocando pretextos tales como el pago del día de descanso a los obreros. Esto se demuestra con el hecho de que los precios de mayoreo no hayan sufrido modificaciones tan acusadas.

Las maniobras de los especuladores no son, por supuesto, nuevas en la historia económica moderna, y el Estado puede ponerles coto con eficacia, por cuya razón el Gobierno toma ya serias medidas para lograrlo, contando para ello con el apoyo unánime de la opinión, de la prensa seria del país y de los sectores de hombres de negocios más conscientes no sólo de su responsabilidad como miembros de nuestra colectividad, sino también de sus verdaderos intereses de capitalistas.

Sólo es de lamentar, que algunos organismos responsables de estos sectores hayan manifestado que consideran razonable y legítima el alza de los precios, cosa tanto más inexplicable si se tiene en cuenta, como se acaba de decir, que esta alza tan pronunciada en los precios de menudeo es más débil en los de mayoreo.

IV

ALGUNOS ASPECTOS DE LA EXPLOTACION DEL PETROLEO EN MEXICO

PARA terminar la demostración de que la situación económica no es alarmante, a continuación damos a conocer el estado que guarda una de las industrias más calumniadas: la petrolera, que floreció en México preponderantemente durante diez años.

Es un estudio comparativo entre la situación de la industria del petróleo en nuestro país y la norteamericana, por lo que se refiere a sus respectivos rendimientos y a los factores fiscal y del trabajo, estudio que rectificará falsos conceptos, contribuyendo a establecer la verdad respecto de la posición de esta industria, considerando sólo los años de 1934 y 1935.

La industria del petróleo en México figura entre las más importantes del país, al lado de la minera, de la de los transportes, de la hidroeléctrica, de la de hilados y tejidos, y superando resueltamente a las restantes, por su inversión y rendimientos. Aunque relativamente joven, pues en su fase propiamente industrial apenas cuenta 35 años de vida, ha alcanzado, sin embargo, notable desarrollo, tanto por el monto de su producción, como por la calidad de sus productos y por su adelanto en la técnica de su explotación.

Mundialmente figura entre las más importantes de la rama del petróleo, ocupando el séptimo lugar entre las de más de treinta países productores.

La posición de México en la producción mundial se ha sostenido en los últimos años, y se conservará al final del presente, en el que figurará entre los países que aumentarán su producción, siendo los principales de éstos, en orden decreciente, Estados Unidos de Norteamérica, Venezuela, México, Irak, Colombia, etc. En otros países el balance de fin de año se cerrará con disminuciones más o menos importantes, como se advierte ya respecto de Rusia, Rumania, Persia, Indias Holandesas Orientales y otras.

La producción de México en el presente año superará a la del año anterior, acentuándose, por tanto, su movimiento ascendente de los últimos años, según lo demuestran las siguientes cifras:

Un aumento más palpable todavía se hace notar en las actividades de refinación, en los últimos 5 años, en los que se ha venido acentuando la expansión progresiva en la elaboración de refinados en las plantas establecidas en México.

Las siguientes cifras muestran de modo elocuente cuál ha sido este desarrollo:

PRODUCCION DE DERIVADOS DEL PETROLEO EN LAS REFINERIAS MEXICANAS

El descenso que se nota en el presente año, es meramente incidental y debido a que durante 4 meses (febrero a mayo), permaneció clausurada la refinería de la Huasteca Petroleum Co., mientras se definían las condiciones de trabajo de los obreros en dicha planta. Simultáneamente con la expansión de sus actividades, las refinerías han ido procurando mejorar sus equipos, para mejorar también la calidad de sus productos y aumentar su rendimiento.

Interesa hacer notar que las refinerías establecidas en México figuran entre las más grandes del mundo, y que por su capacidad sólo son superadas por algunas de las de los Estados Unidos de Norteamérica, por algunas de Rusia, por la de la Deutch Shell, en Curaçao, por la Standard en la Isla de Aruba (ambas en el Caribe) y por la de la Anglo-Persian en el Irán (Persia.)

Igualmente significativo es el aumentó de nuestro consumo de productos petroleros, consecuencia inmediata de la palpable mejoría económica de nuestro país, y consecuencia de la política que ha venido desarrollando la Administración Mexicana, para favorecer el desarrollo agrícola e industrial de México y la expansión de nuestras comunicaciones. La comparación de nuestro consumo en los últimos 5 años a que nos venimos refiriendo, es la siguiente:

DERIVADOS PETROLEROS CONSUMIDOS

En este consumo requiere mención especial, el de la gasolina, factor cada vez más importante en la vida de nuestro país, y vital para nuestras comunicaciones, a cuyo sostenimiento y expansión está íntimamente ligada, ya que a un mayor ingreso fiscal por consumo de gasolina, corresponden mayores posibilidades para la conservación de los caminos y la construcción de nuevas carreteras; del mismo modo que el buen estado de éstas y la apertura de nuevas vías, produce de inmediato la expansión del consumo.

Así, vemos que desde 1925 en que se creó un impuesto sobre el consumo de la gasolina, destinado exclusivamente a la construcción y conservación de carreteras en México, el consumo de la gasolina ha ido aumentando; de modo que mientras en el citado año de 1925, el consumo total fué de 141. 294, 668 litros, en los últimos 5 años ha sido el siguiente:

El Gobierno Mexicano, dándose cuenta de la importancia que tiene para el país la expansión y conservación de sus carreteras, ha dedicado escrupulosamente a tal fin la recaudación íntegra por concepto de consumo de gasolina, y no sólo, sino que aun ha invertido fuertes sumas de su presupuesto general para poder conservar, sobre un pie de actividad no interrumpida, la construcción y conservación de los caminos.

Paralelamente, ha velado por que no se especule con este producto, considerado en el mundo entero como de primera necesidad, y por tal motivo, de acuerdo con lo prevenido en la Ley Reglamentaria del Artículo 23 Constitucional, se estudiarán concienzudamente las condiciones de producción y distribución de la gasolina en México, habiéndose dictado en septiembre último el decreto que fija el precio máximo de venta de la gasolina, precio considerado como razonable para el productor y para el consumidor, y se resolvió para el año próximo, sacrificar una parte de los ingresos por consumo de gasolina, reduciendo el impuesto en proporción que no entorpezca el amplio programa de construcción de caminos.

Por lo que se refiere a nuestras exportaciones petroleras, no se nota que hayan seguido un curso regular en los últimos 8 años, lo que se debe seguramente a las condiciones de crisis o incertidumbre económica que prevaleció en el mundo entero, que en muchos países se prolongó hasta mediados de 1934. Las siguientes son las cifras de nuestras exportaciones petroleras en el período de referencia:

VOLUMEN DE PRODUCTOS PETROLEROS EXPORTADOS

Posiblemente la cifra que hemos calculado como total para 1935 se vea superada al concluir el año, dado que es notorio el inusitado movimiento que ha estado habiendo en nuestros puertos petroleros por la salida de barcos cargados con derivados del petróleo, de preferencia, con destino a Europa, siendo indudable que éste movimiento en lugar de decrecer en lo que falta del año, aumentará, dados los preparativos bélicos y las medidas de seguridad preventiva que rápidamente están adoptando las grandes potencias europeas, y en lo cual el petróleo figura como capítulo de primera importancia.

Aunque los datos que dejamos consignados dan una idea bastante clara del favorable aspecto que presenta la industria petrolera en México en el presente año, estimamos oportuno hacer del conocimiento público otros datos comparativos entre la situación de la industria petrolera en nuestro país, y la de los Estados Unidos de Norteamérica, por lo que se refiere a sus respectivos rendimientos y a los importantes factores fiscal y de trabajo, pues éste rectificará falsos conceptos y contribuirá a abrir paso a la verdad, dejando precisada claramente cuál es en realidad la posición de la industria en nuestro medio económico y social.

Principiaremos por el factor fiscal:

Instituciones técnico-económicas de los Estados Unidos de Norteamérica, así como asociaciones petroleras, han publicado informes, según los cuales la industria petrolera en Estados Unidos pagó en 1934 una suma de impuestos de diversos órdenes, qué en total ascendió a 1, 036. 149, 575 dólares, lo que para una producción en el mismo año de 908. 065, 000 barriles, significa una tributación por barril de 1. 14 dólar, o sean $4. 10 en moneda mexicana por barril. En contraste, en México, la suma de impuestos de toda especie, que pagó la industria petrolera en el mismo año (inspección, perforación, terrenos federales, regalías, income-tax, producción, exportación, barra, consumo de gasolina, etc.), fué en total de $40. 000, 000. 00, lo que para una producción de 38. 171, 946 barriles en el mismo año, significa una tributación por barril de $1. 05 moneda mexicana, esto es, aproximadamente, la cuarta parte de lo pagado en Estados Unidos.

Pasemos ahora al factor trabajo:

En los Estados Unidos de Norteamérica, el promedio de sueldos y salarios pagados en 1934, fué de 4. 48 dólares diarios por persona, o sean $16. 13 mexicanos. En México, en el mismo año, el promedio de sueldos y salarios fué de $4. 68 mexicanos diarios por persona, o sea aproximadamente la cuarta parte de lo pagado en los Estados Unidos.

Rendimiento. —En los Estados Unidos de Norteamérica, durante 1934, con un personal de 1. 250, 000 obreros y empleados, se obtuvo una producción de 908. 065, 000 barriles, o sean 726 barriles por persona. En México, en el mismo año, teniendo ocupado a un personal de 16, 400 obreros y empleados en la industria petrolera, se obtuvo una producción de 38. 171, 946 barriles, o sean 2, 328 barriles por persona. De modo que el rendimiento por persona en México fué poco más del triple del obtenido en los Estados Unidos de Norteamérica.

Recuperación. —En los Estados Unidos de Norteamérica, con una inversión hasta el año de 1933 (no tenemos el cálculo hasta diciembre de 1934), estimada en 12, 000. 000, 000. 00 dólares, se había obtenido una producción hasta el 31 de diciembre de ese año, de 15, 690. 379, 000 barriles, con un valor de 19, 510. 984, 000. 00 dólares: significando éste una recuperación por unidad de inversión de 1. 6. En México, con una inversión hasta el 31 de diciembre del mismo año, de $960. 000, 000. 00 mexicanos, se había obtenido hasta igual fecha una producción de 1, 699. 262, 008 barriles, con un valor de $3, 146. 224, 929. 00, lo que acusa una recuperación por unidad de inversión de 3. 3: casi el triple de lo logrado en los Estados Unidos de Norteamérica.

Así pues, en los Estados Unidos la industria petrolera pagó impuestos y jornales que son aproximadamente el cuádruplo de lo que se pagó en México; el rendimiento por persona ocupada en nuestro país fué aproximadamente el triple de lo que se obtuvo en los Estados Unidos de Norteamérica, y la recuperación de la inversión del capital en México ha sido casi el triple comparada con la de los Estados Unidos.

Tal es la situación de la industria petrolera en México comparada con la norteamericana, considerada con razón, como la más importante del mundo. No creemos necesario comentar estos últimos datos y cifras que consideramos de suyo elocuentes.

EL PROCESO SOCIOLOGICO DE MEXICO A TRAVES DE LA ESTADISTICA

EL día 12 de marzo, la Confederación de Trabajadores de México, dirigió un Manifiesto al Pueblo de la República, en el que a la vez que se refiere al Memorial de las clases patronales enviado al Señor Presidente de la República, fundamenta la actitud de las clases laborantes de México, partiendo de bases estadísticas y de exposiciones de carácter sociológico. Es esta parte del Manifiesto la que, por su carácter documental, de indiscutible importancia, reproducimos en seguida, por el interés que para quienes, dentro o fuera del país, observan nuestro desenvolvimiento social, tiene conocer el fondo o el punto de partida histórico de nuestros grandes problemas.

He aquí la parte medular que del citado Manifiesto tomamos:

"Sin referirnos a la época anterior a la Conquista; sin juzgar tampoco la situación de México durante los largos siglos del virreinato; juzgando sólo el período de la vida independiente del país, la estadística y las publicaciones oficiales arrojan los siguientes datos:

SALARIOS

En los últimos años de la Colonia, el salario promedio de los campesinos en las "tierras frías", era de $0. 25; el salario promedio en las "tierras calientes", era de $0. 30. En 1828, los obreros pagados en dinero percibían un jornal de $0. 12 1/2 a $0. 37 1/2. En 1891, los peones del campo recibían como salario promedio en la República, la cantidad de $0. 36. En la década comprendida entre 1900 y 1910, el promedió de los salarios era de $0. 46. En 1926, el promedio de salario en la República era de $1. 14. En 1933, como resultado del acuerdo del Presidente de la República sobre el establecimiento del salario mínimo, el salario promedio a través del territorio nacional, fué de $1. 43. Al comenzar el presente año de 1936, el salario promedio en el país es de $1. 62.

COSTO DE LA VIDA

Los salarios nominales, como todo el mundo lo sabe por experiencia, no revelan nunca el verdadero standard de vida de la población; es indispensable compararlos con su poder adquisitivo. He aquí algunos datos sobre el aumento de los precios, correspondientes a las épocas en las que el salario ha sufrido aumento. Entre 1791 y 1891, el arroz aumentó en un 69. 34%; el maíz en un 42. 86%; el trigo, en un 182. 78%; el frijol, en un 305. 52%. Los precios de 1908, comparados con los de 1792 aumentaron como sigue: para el arroz un 75. 62%; para el maíz, un 179. 43%; para el trigo, un 465. %; para el frijol, un 565. 03%. En estos 116 años, los salarios de los trabajadores del campo permanecieron, en cambio, sin ninguna variación, representando la población agrícola del país (1910) las tres quintas partes de la población mexicana: 9. 591, 552 habitantes, de un total de 15. 160, 369 individuos. Los salarios de los obreros manuales en la ciudad de México, que es la Entidad de la República en la que siempre se han pagado mejores jornales, en 1927 eran, como promedio, de $1. 19 a $1. 75. Ahora bien, el estudio hecho en ese mismo año, por la Secretaría de Industria, Comercio y Trabajo, sobre el costo de la vida puramente biológica (presupuesto simple de subsistencia) para una familia compuesta de cinco personas, da la cantidad de $2. 90, como mínimo, para el Estado más atrasado del país, el Estado de Chiapas, y de $4. 94 para el Distrito Federal. El último de los estudios realizados (Dirección General de Estadística. Julio-agosto de 1934), sobre el costo de la vida en el Distrito Federal, demuestra que los ingresos promediales por familia obrera (cinco personas) y por semana, son de $22. 42, de los cuales $14. 66 son el producto de ocho horas de trabajo diarias, del jefe de la familia, y la diferencia entre este ingreso y los ingresos totales ($22. 42) se obtiene mediante trabajo extraordinario, trabajo de los demás miembros de la familia, ayudas de parientes de fuera, y préstamos y empeños. De este presupuesto miserable, mientras que en los Estados Unidos de Norteamérica la familia trabajadora dedica el 33. 4% a gastos de alimentación, y en los Países Bajos el 43.4%,en la ciudad de México tiene que pagar del 51. 3% al 60, 3%, cantidad únicamente parecida a la que gasta la familia trabajadora en la ciudad de Shanghai, que representa el 57.4% de los ingresos. Con motivo del aumento de $0. 50 al salario mínimo en el Distrito Federal, a partir del día primero de enero del corriente año, y del pago del dia de descanso que acaba de acordar el Congreso de la Unión, los precios han aumentado en tal forma, que estamos presenciando, en los actuales momentos, una verdadera manifestación popular de indignación en contra de los explotadores de los obreros, de los campesinos, de los empleados, de los profesionistas  y de todos los sectores que constituyen el proletariado y la clase media, sujeta ésta a las mismas contingencias que los asalariados de las diversas ramas de la industria.

DESNUTRICION DE LA RAZA

Esta situación de privación permanente, y de hambre verdadera en muchos casos, en que ha vivido a través de su historia la mayoría del pueblo mexicano, revela la constante protesta en que también viven los trabajadores de muestro país. En 1925 el Departamento de Estadística Nacional llevó a cabo un estudio técnico sobre la alimentación popular, y demostró que la mayoría de las familias obreras está mal nutrida, que casi la totalidad de la población agrícola de la República vive en un equilibrio biológico inestable, y que se puede establecer la siguiente ley respecto de la nutrición de nuestro pueblo: el número de calorías es inferior al requerido para el mantenimiento del organismo humano, en México, en condiciones normales; el número de calorías disminuye a medida que se desciende en los diversos sectores sociales, del empleado al campesino.

SALUBRIDAD PUBLICA

Las consecuencias visibles de esta pavorosa situación, son bien conocidas. Los datos de 1916 presentan la siguiente situación: a) El coeficiente de la mortalidad de México, (42. 3 por mil) es casi tres veces el promedio del coeficiente de mortalidad de las ciudades norteamericanas de población importante (16. 1 por mil); b) es casi dos veces y media mayor que el promedio coeficiente de mortalidad de ciudades europeas de una población comparable (17. 53 por mil); c) es mayor aún que el coeficiente de mortalidad de las ciudades asiáticas de Madrás y El Cairo (39. 51 y 40. 15 por mil, respectivamente), no obstante que en esas ciudades el cólera es endémico. En 1935 la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, a propósito de la Ley Sobre Dotación de Agua Potable a las Poblaciones de la República, publica estas cifras: en Australia se registran 32 defunciones entre 1, 000 nacimientos; en Holanda 44; en los Estados Unidos de Norte América 54; en Inglaterra 63; en Canadá 73; en Francia 75; en México 136. En la ciudad de México, con una población de un millón de habitantes, había veinte mil prostitutas registradas en el año de 1926; esta cifra ha aumentado quizá, a partir de la crisis de 1929, como ha acontecido en todas partes del mundo. La estadística de los últimos diez años, enseña que mientras en Noruega se consumen 2. 31 litros de alcohol puro, por persona en un año, y en Holanda 4. 20, en México se consumen 7. 93 litros por individuo en un año también. En nueve Estados productores de pulque y en el Distrito Federal, el promedio es de 1 1/4  litro por persona al día. Este dato es una prueba más de la falta de nutrición de la masa campesina, pues está comprobado científicamente que, gracias a las vitaminas que contiene el pulque, ya que su alimentación, basada en el maíz y en algunos insectos comestibles, no le basta para mantener su equilibrio biológico, no ha sucumbido todavía. Para completar este cuadro hay que recordar lo que para la salud de nuestro pueblo significan las enfermedades tropicales, desde el paludismo que abarca casi todo el territorio nacional, hasta la ceguera ocasionada por determinados insectos en algunos Estados de la vertiente del Pacífico.

PROMEDIO DE LA RENTA INDIVIDUAL

La población económicamente activa del país, alcanza, apenas (1930) a 5. 165, 803 individuos, que forman el 31. 21% de la población total, entendiendo por población económicamente activa la formada por personas con ocupaciones retribuidas; el resto de la población, o sea el 68. 79%, pesa sobre esta minoría cuyo standard de vida ha quedado ya expuesto. Este dato es de una gran trascendencia por la siguiente razón: el promedio de la renta de cada persona en nuestro país, tomando en cuenta a los mexicanos y a los extranjeros residentes en nuestro territorio, es de 408. 00 dólares por individuo; la renta personal de cada mexicano es de 192. 00 dólares, mientras que la renta individual de cada extranjero es de 22, 350. 00 dólares; dicho de otro modo: 17. 000, 000 de mexicanos poseen, en total, la suma de $3, 140. 804, 136; los 161, 000 extranjeros que habitan en nuestro territorio, representando intereses propios o del exterior, poseen, solos, $3, 616. 195, 864. No hace falta recordar, después de los datos que preceden, los números de nuestra balanza comercial, para poner en evidencia nuestra situación de país semifeudal y semi- colonial, en donde impera, como dueño absoluto, el capital propio y el extraño, y en donde nuestro pueblo sólo ha conseguido, hasta ahora, en el curso de largos siglos de sacrificios de toda índole, un standard de vida que lo coloca en el límite extremo de la subsistencia material y al que jamás podrán llegar la cultura ni los bienes de orden superior, mientras siga vegetando en las condiciones trágicas en que se encuentra.

Recordadas, así, la situación del proletariado y la estructura económica de México, es fácil comprender también los móviles de la constante actitud de rebeldía de la clase patronal establecida en nuestro territorio, en contra de los medios que en el curso del tiempo se han adoptado por los diversos Gobiernos para mejorar la situación de la mayoría de nuestro pueblo. A la burguesía nacional, aliada al capital extranjero, que sólo ve en nuestro país una fuente de materias primas y un mercado para sus manufacturas y para su capital sobrante, no le conviene que México pierda su fisonomía de país semifeudal y semicolonial, pues una de las características de las que definen a todo pueblo que carece de autonomía económica, es el hecho de su mano de obra barata, gracias a la cual son posibles los salarios elevados de los obreros de los países de gran desarrollo industrial y financiero, así como las cuantiosas rentas que obtienen los inversionistas de los pueblos materialmente atrasados. He aquí la prueba, tomada de datos oficiales:

MINERIA

Valor de la producción (1930) $291. 432, 000. 00; valor de la producción (1935) $413. 460, 000. 00; valor de la producción del oro (1930) $27. 746, 000. 00; valor de la producción del oro (1935).. $84. 807, 000. 00:; valor de la producción de la plata (1930). $83. 902, 000, 00; valor de la producción de la plata (1935). $175. 311, 000. 00; valor de la producción del petróleo (1930). $80. 932, 000. 00; valor de la producción del petróleo (1935). $137. 345, 000. 00.

INVERSIONES EN TERRENOS, MAQUINARIA, ETC.

(Capital fijo) aumentaron en el quinquenio 1929-1934, en $230. 739, 000. 00.

El valor total de la producción en 1934 aumentó respecto de la de 1929, en $170. 000, 000. 00.

COMERCIO EXTERIOR

Importaciones (1930) $350. 000, 000. 00; importaciones (1935) $406. 000, 000. 00; exportaciones (1930) $459. 000, 000. 00; exportaciones (1935) $750. 000, 000. 00.

DEPOSITOS BANCARIOS

En 1931, $215. 000, 000. 00; en 1935, $495. 000, 000. 00.

CREDITOS CONCEDIDOS POR LOS BANCOS

(Datos de la Comisión Nacional Bancaria), diciembre de 1930, $230. 000, 000. 00; diciembre de 1935, $306. 000, 000. 00.

IMPUESTO SOBRE EL AUSENTISMO

Hay dos tasas para este impuesto: una de 2% sobre las sumas enviadas desde nuestro país a los residentes en el extranjero, y una del 4% sobre las sumas de dinero que se envían para el extranjero, con el objeto de ser invertidas, por personas o empresas residentes en nuestro país. El 95% de los impuestos hasta hoy recaudados por concepto del ausentismo, corresponde a la tasa del 4%. En 1935 el impuesto en total produjo la suma de $6. 000, 000. 00 al Erario Nacional, lo cual demuestra que casi... $180. 000, 000. 00 salieron de México para invertirse en el extranjero, como producto de las ganancias del capital invertido en nuestro país. Estas cifras demuestran el espléndido negocio que hacen los propietarios en esta nación, a la que tachan de convulsa, de anárquica, y en otras formas igualmente denigrantes e injustas. Por eso la clase patronal ha retado al Presidente de la República, y lo conmina a que defina su actitud en favor o en contra de la ley, como si el General Lázaro Cárdenas la hubiera violado en alguna ocasión; por eso emplea el lenguaje atrevido de la amenaza, en que está redactada su última proclama, del día 11 del presente mes."

OPTIMISTA INFORME DEL BANCO NACIONAL

LA Revista Mensual editada por el Banco Nacional de México, correspondiente al mes de febrero del año en curso, en el examen que hace de la situación económica de México, dice que este año, con sorpresa de muchos, las ventas se mantuvieron a buena altura en diversas ramas del comercio, y el estado de los negocios fué en general satisfactorio. Después agrega: "A pesar de que las cosechas del año fueron inferiores a las de 1934, la demanda tiene, según parece, la misma fuerza. Se levantaron 1. 361, 000 toneladas de maíz, contra 1. 700, 000 de 1934; el déficit es corto, pero como la cifra del año pasado fué más baja que la de 1933, los resultados indicarían que la agricultura estaba en decadencia. La explicación es otra. Sucede que, conforme progresa el reparto de tierras que en estos meses se ha intensificado, hay menos cosechas disponibles porque hay también menos consumidores de la misma, o sean los peones que pasan a ser propietarios de su terreno. La cosecha de frijol ascendió a 111, 140 toneladas, contra 121, 373 del año anterior. De trigo se alzaron 279, 000 toneladas, contra 298, 000 de 1934. Aumentó en cambio la cosecha de garbanzo, y la de algodón tuvo buenos rendimientos, aunque en clases inferiores, por las lluvias.

"Estos factores, sumados a los propios de la estación, serían motivo suficiente para empeorar la situación económica, ya un poco turbada por acontecimientos de índole o carácter social. Sin embargo, la actividad no ha decaído, especialmente la de la industria manufacturera, como advertirán los lectores del Boletín por los datos que suministramos a continuación.

"La de hilados y tejidos sigue trabajando a un turno, en vez de dos o tres, de ocho horas cada uno; pero la producción se realiza normalmente, y no hay indicios de que la situación empeore por este lado. Las fundiciones de hierro y acero siguen trabajando a toda capacidad, para atender los pedidos de materiales para construir y otros, aunque puede considerarse cómo factor del movimiento advertido, la demanda de los aludidos materiales. La solicitud por artículos de vidrio es igualmente vigorosa, y debido a los altos precios de los extranjeros, se están prefiriendo los nacionales. La industria relativa progresa a ojos vistos, y tiene perspectivas brillantes. Existe, además, una fuerte demanda de artículos propios para habitaciones nuevas, principalmente en la ciudad de México, que imprime un movimiento satisfactorio a las industrias correspondientes.

"El sentir general entre comerciantes, banqueros y hombres de negocios, no es propiamente pesimista respecto de 1936. Claro que el desarrollo de los conflictos de la industria, y su persistencia, implica un factor de inquietud innegable; pero la economía parece sobreponerse a las circunstancias del momento, lo que vendría a constituir una prueba de la fuerza o pujanza de las causas de recuperación o ascenso económico. Todos los negocios han derivado un beneficio positivo de las excelentes condiciones que rodearon a la minería dos largos años, y según informes recientes comienza a reportarlas por otros conceptos de importancia, parecida a la de la minería. Nos referimos, claro está, al petróleo".

Más adelante, al tratar de los precios en general, agrega: "Desde septiembre del año próximo pasado, los precios están bajando, contra las previsiones que se habían hecho con anterioridad."

El movimiento de los precios, según el Banco Nacional, puede apreciarse en la tabla siguiente:

En el cuadro que presenta el folleto del Banco Nacional, en lo que se refiere al comercio exterior, dice: "Los datos relativos al comercio exterior del país, por el año de 1935, son al parecer, satisfactorios. Se exportaron mercancías por valor de $750. 292, 490, contra $643. 710, 297 del año anterior. La diferencia entre ambas cantidades asciende a $106. 582, 193. Las importaciones de 1935 fueron $406. 400, 000, contra $333. 975, 908 de 1934, o sea un aumento de $72. 424, 092. La diferencia entre las exportaciones y las importaciones del año de 1935, ascendió a $343. 892, 490, mientras que la de 1934 llegó a $309. 736, 389.

"La porción más grande de las exportaciones se la llevó la venta de metales y petróleo, que subió en 1935 a $559. 325, 797, en tanto que la del año anterior fue de $511. 001, 277. En 1935, se exportaron, en consecuencia, $48. 323, 290 más.

"No obstante las leves modificaciones que ha registrado el intercambio mercantil en las últimas décadas, subsiste la estructura general del mismo; sigue el. país, como decimos en otra parte, siendo importador de artículos manufacturados, y exportador de materias primas, principalmente minerales. El progreso de las cifras correspondientes se debe, más que a otra cosa, al alza de los productos americanos y a la persistencia, y aun a la baja de algunos precios en el interior del país. De aquí que el porcentaje de aumento sea mayor para las exportaciones que para las importaciones."

Sobre la cuestión social, el Banco Nacional dice, al referirse al movimiento de unificación de los trabajadores, que indudablemente una organización obrera más vasta que la que había, la que, si no comprende todos los grupos, cuando menos cuenta con los más caracterizados y numerosos del país, puede ser, si sus directores tienen conciencia de la responsabilidad, una ventaja en vez de constituir una amenaza, como muchas personas piensan. "En primer lugar —comenta— porque se suprime la acción anárquica de los sindicatos, aislados, sin idea clara de los perjuicios que su actitud frecuentemente irracional causan a la sociedad entera. Habrá huelgas en lo venidero; tendremos dificultades industriales de trascendencia y gravedad; pero disminuirá la zozobra que había en el mundo de los negocios, con motivo de las agresiones de que eran victimas las empresas, con pretextos absurdos.

"Por otra parte, la magna importancia de los intereses de una central de trabajadores, impone a quienes la dirigen cordura y tacto en sus prácticas. Su fuerza los obliga a ser cautos y a mantenerse dentro de los límites que marcan los imperativos del medio en que operan.

"La sociedad no está alarmada por la centralización de la lucha obrera. Sabe que ésta no puede moverse fuera del marco constitucional que el Presidente de la República subraya de cuando en cuando. Sin ir muy lejos, al dirigirse a los trabajadores de El Ébano, S. L. P., les dijo que deseaba que el conflicto pendiente se resolviera cuanto antes, "porque están vinculados por igual Jos intereses de los obreros, de la empresa y del mismo Gobierno." Y, agregó: "la política del Gobierno está dirigida a mantener el equilibrio entre los factores que intervienen en la producción, que son el. trabajo y el capital. Para qué ese equilibrio sea estable, es necesario que repose en una ancha base de justicia social, y en un elevado espíritu de equidad que presida las relaciones obrero — patronales. El Gobierno, dijo en otro párrafo de su discurso, evitará cualesquiera exigencias inmoderadas, pero velará por que se atiendan las demandas justas de los trabajadores."