5 de Mayo de 1862, Felipe Berriozával
"Cuerpo de Ejército de Oriente. 3/a. División.
General en Gefe.
Cuartel Maestre."
"Cpo. de Ejército de Oriente.—Brigada Berriozával.—General en Gefe.—En cumplimiento de las órdenes é instrucciones vervales que el C. Gral. en Gefe se sirvió darme la noche de ayer, me situé en la mañana de hoy en la Garita de Amozoc, con la Brigada que está á mis órdenes, compuesta de los Batallones Fijo de Veracruz, 1/o, y 3/o. Ligeros de Toluca, formada en dos columnas de ataque y listo para dar con ellas la carga preventiva llegado el caso que se me fijó.— A las once de la mañana por orden del C. Gral. en Gefe me dirijí á paso veloz á la altura de los cerros de Guadalupe y Loreto con el objeto de auxiliar al C. Gral. Miguel Negrete, encargado de la defenza de aquellas posiciones.—Llegué oportunamente, pues el enemigo estaba acabando de organizar sus fuerzas para el ataque. Convine con el mismo Gral. Negrete en que con sus reservas y mi brigada formáramos una batalla, apoyada por una zanja ensolvada, en cuyas estremidades se encuentran las mencionadas posiciones de Loreto y Guadalupe. Asi se verificó y haciendo la maniobra á paso veloz quedó establecida la batalla y lista á resistir el choque del enemigo.—A las once y tres cuartos dos batallones de Zuavos, estendidos en tiradores se nos presentaron haciendonos un fuego mortífero y preparando la carga de dos columnas que avanzaban intrépi damente, sobre nuestras líneas protejidos por un fuego vivísimo de artillería rayada. Nuestros tiradores de batalla se replegaron en buen orden, y el enemigo con una bravura propia del soldado frances y digna de mejor causa, se arrojó sobre nosotros. Nuestros sufridos soldados no menos valientes tal vez que los franceses, recibieron el fuego nutrido de los Zuavos sin disparar sus armas, esperando la voz de mando de sus Gefes. Cuando tuvimos al enemigo, á menos de cincuenta pasos el C. Gral. Negree y yo, mandamos romper el fuego y. los valientes soldados franceses vinieron a morir á quince pasos de nuestra batalla. Las columnas fueron diezmadas por nuestras fuerzas, puestas en completo desorden y obligadas a huir al frente de los modestos soldados de Méjico, quienes cargaron inmediatamente sobre ellos trabándose entre algunos soldados un reñido combate a la balloneta, que nos hizo al fin dueños del campo.—El valiente Coronel Cama ra tomó la bandera de su Cuerpo, el 1er. Ligero de Toluca al cargar sobre los invasores los Batallones Fijo de Veracruz y 3er. Ligero, no se quedaron otras y sus Gefes se distinguieron por el orden con que lo ejecutaron.—El enemigo entendido y tenaz tenia preparadas nuevas columnas y fuertes alas de tiradores con ellas volvió inmediatamente á la carga; pero los Gefes todos de nuestras fuerzas y muy particularmente el C. Gral. Negrete cuya serenidad y actividad fué notable, restablecimos la batalla y esperamos el otro empuje que hacía el enemigo: Sus esfuerzos fueron inútiles y por segunda vez lo obligamos á huir dejando multitud de muertos que recibieron la bala por la espalda.—Por segunda vez cayeron Cambien con un arrojo estraordinario nuestros cuerpos y el Ejército frances habría quedado enteramente destruido en esos momentos si hubiéramos tenido desde el principio alguna caballeria de que disponer; pero estaba empleada por otros puntos y á pesar de haberla pedido repetidas veces no fué posible que llegase hasta concluir la última carga.—Sin embargo de esto su presencia y el arrojo con que el valiente Gral. Albaraz cargó en el poco terreno de que podía disponer, bastó para que el enemigo no volviera su ataque de frente; pero sí, volvió a llamarnos la atencion con algunos tiradores mientras por el flanco derecho de la fortificacion de Guadalupe cargaba una fuerte columna de cazadores de Vincennes, que con un arrojo estraordinario llegó hasta el Foso y algunos de sus soldados asaltaron el Parapeto; mas los cefensores del Punto, con una serenidad admirable lograron arrojarlos, quedando en dicho Foso mas de treinta cadáveres del enemigo.—En estos momentos se me presentaba el batallon Reforma de San Luis, que me envió el C. Gral. en Gefe, ce cuyo cuerpo destaqué una compañía para que batiera al enemigo por el flanco derecho. Este fué destruido completamente y como las anteriores nos presentaron sus soldados la espalda; sin haber vuelto á emprender otro ataque desde eso hora que eran las cuatro y media de la tarde.—Pendiente y dedicado al costado derecho de nuestra línea que era por donde el enemigo redoblaba sus ataques, no pude observar el izquierdo ton la precisión que hubiera deseado para car cuenta al C. Gral. en Gefe de los hechos más notables de los batallones que lo cubrían; pero el C. Gral. Negrete lo hará indudablemente por ser fuerzas de su division.—Todos los Gefes y Oficiales de la brigada de mi mando se han portado brillantemente y con verdad puedo asegurar que no he notado un solo rasgo de cobardía en ninguno de ellos; por lo cual no hago especiales recomendaciones, pues repito que todos han cumplido perfectamente con su deber; y solo de esta manera puede explicarse como ha sido derrotado un enemigo acostumbrado a vencer en todas partes, como lo demuestran las condecoraciones que portan al pecho y que fueron arrancadas en medio del combate por nuestros soldados.—En nuestro poder cayeron varios prisioneros que se remitieron á la plaza y hasta ahora se han recogido más de trescientos cadáveres del enemigo.—Nosotros tambien tenemos que lamentar la perdida de algunos soldados y la herida grave del valiente y pundonoroso Teniente Coronel C. José G. Alcalá, Gefe de mi Estado Mayor, así como la del Teniente Susano Nieto, y Subteniente C. Margarito Moreno, ambos del ler. Ligero de San Luis. Se estan formando las relaciones respectivas de los muertos y heridos que tuvo lo Brigada, así como del armamento quitado al enemigo, con las cuales daré á V. cuenta oportunamente para conocimiento del C. Gral. en Gefe. Los cuerpos que componen la brigada de mi mando al cumplir con su deber han comprendido que de su comportamiento en los primeros encuentros que tubiéramos con el enemigo estrangero dependía el que se asegurara o perdiese la Independencia de su Patria. El orgulloso soldado frances ha sido humillado hoy, aniversario de la muerte de Napoleón I, y por primera vez segun los mismos prisioneros lo han asegurado, se vieron obligados á huir al frente de sus enemigos llevando su bandera sin gloria que ha conquistado en mil combates.—Al dar á V. cuenta con lo ocurrido en memorable funcion de armas de que ha tenido lugar el día de hoy, para conocimiento del C. Gral. en Gefe, lo felicito por el brillante resultado que hemos obtenido y por que ella honrará siempre á Méjico, sean cuales fueren los sucesos posteriores."
"Dios, Libertad y Reforma.—Fuerte de Guadalupe. mayo 5 de 62.—Felipe Berriozával.—C. Gral. Cuartel Maestre del Cuerpo de Ejército de Oriente."
"Es copia del original.
Mejía.
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