Veladero, marzo 28 de 1813.
Excelentísimos señores:
Con esta fecha digo a Rayón lo siguiente:
“Siempre he procedido de buena fe trabajando continuamente, para pedir mi retiro concluida la empresa. Pero por las discordias entre los compañeros, no me fiaré de nadie en adelante.
Se me ha informado que entre loe compañeros tengo el epíteto de déspota. Las razones siguientes me justifican: el cura Hidalgo me dio el titulo de su lugarteniente en el sur, nunca he querido usar de este titulo: la Junta de Zitácuaro me nombró teniente general y di gracias a los señores, loque no prueba despotismo. Todo el reino ha querido sujetarse a mis órdenes y lejos de consentir, yo he procurado que todos reconozcan a la Suprema Junta. El no tener yo capitán sin compañía, coronel sin regimiento, brigadier sin brigada, no arguye despotismo, sino buen orden. Por eso mismo no he querido admitir oficiales de otro departamento, sino que comiencen su carrera desde soldados".
Lo participo a vuestras excelencias para su inteligencia.
Veladero, 28 de marzo de 1813.
Morelos a Verduzco y Liceaga.
|