Abril 2 de 1867

Las fuerzas imperialistas de Noriega son derrotadas en Puebla. La ciudad está sitiada por Porfirio Díaz, de la misma manera que Querétaro por Mariano Escobedo quien constantemente solicita apoyo para impedir que Maximiliano salga de la ciudad.

Díaz explica al ministro de Guerra que no es posible abandonar el sitio de Puebla, pero que ha ordenado a Juan N. Méndez que con un contingente se ponga a las órdenes de Escobedo y manda a la división al mando de Francisco Leyva para perseguir a Leonardo Márquez quien había escapado antes de ser cerrado el sitio de Querétaro.

Márquez estaba en la ciudad de México y el 30 de marzo pasado había salido con 3840 hombres y 17 piezas de artillería; para desorientar a los republicanos va a San Cristóbal, luego a Tizayuca, gira hacia Zumpango. El 1 de abril todavía parece que va hacia Querétaro pero por la noche da la vuelta hacia San Juan Teotihuacan y finalmente toma rumbo a Puebla seguido por otra columna republicana al mando de Amado Antonio Guadarrama que lo persigue. Cuando Díaz se entera del movimiento de Márquez, decide violentar el ataque sobre Puebla y este día, a las 6 de la mañana se apodera de la plaza. Parte de la guarnición imperial se refugia en los cerros de Loreto y Guadalupe.

Al día siguiente, Díaz escribiría a Juárez: “Puebla en nuestro poder, con un magnífico tren de sitio ya abundantes municiones; Márquez detenido y expuesto a perderse y perder a México”. El día 4 de abril siguiente, Díaz toma los fuertes de Loreto y Guadalupe. Mientras tanto, Guadarrama y Leyva siguen en persecución de Márquez.

Doralicia Carmona: MEMORIA POLÍTICA DE MÉXICO.