Marzo 4 de 1913

En San Luis Potosí, Alberto Carrera Torres, proclama la “Ley Ejecutiva del Reparto de Tierras”: Desconoce a Victoriano Huerta y a sus seguidores; anuncia el decomiso de las imprentas de los periódicos enemigos de la revolución y que los periodistas que publiquen noticias falsas y perjudiquen las operaciones militares constitucionalistas, serán inmediatamente pasados por las armas, tan luego como sean capturados. Declara expropiados los bienes de Porfirio y Félix Díaz, Victoriano Huerta y todos los partidarios; no reconoce alguna deuda interior o exterior contraída por ellos en nombre de la Nación.

También declara organizada la Primera Junta Agraria y que las haciendas de Porfirio y Félix Díaz, Huerta, Mondragón, Blanquet, Reyes, Orozco, Iñigo Noriega, Creel, Terrazas y demás partidarios, “serán repartidas inmediatamente en porciones de cien mil metros cuadrados para cada familia en toda la Nación, entregándoseles en el acto títulos provisionales á reserva de ser revisados y aprobados en primer lugar por la Junta Agraria y en definitiva por Junta Suprema Ejecutiva de la Nación, previa intervención de ingeniero para el terreno cerril y las sierras de la República”. Enfatiza que se impulsará la agricultura y la restitución de tierras. (Ver Documento) El hecho ocurre antes de que Carranza expidiera Plan de Guadalupe.

En septiembre siguiente, en Ciudad del Maíz, San Luis Potosí, es publicado otro documento “Ley Ejecutiva del Reparto de Tierras acordada por el general Alberto Carrera Torres, Jefe de las columnas constitucionalistas”. Por documento los Cedillos se adhieren a la Ley Agraria de Carrera; tiene de particular, que reconoce como autoridad suprema a Venustiano Carranza.

Nacido en Tula, Tamaulipas (ca. 1888), Alberto Carrera Torres fue maestro de primeras letras y estudiante de leyes. En 1905 se afilió al Partido Liberal Mexicano y luego se dedicó a asesorar gratuitamente a los desamparados.

Fue perseguido, encarcelado y torturado bárbaramente y en 1910 en la zona limítrofe entre Tamaulipas y San Luis Potosí, se levantó en armas. Por sus ideas de reivindicación agraria, estuvo a punto de morir y fue Gustavo Madero quien lo salvó; poco después integró sus fuerzas a las del Ejército del Noreste. Cuando Huerta fue vencido, lo mandaron a licenciar a las fuerzas federales de Mérida y Quintana Roo; enfrentó la rebelión de los contrarrevolucionarios.

Apoyó a la Convención y luchó contra el constitucionalismo. Derrotado, se mantuvo en armas aliado con los hermanos Cedillo. En febrero de 1917, a pesar que estaba amnistiado, fue aprehendido y fusilado el 16 de febrero de 1917, en Ciudad Victoria, Tamaulipas, por Luis Caballero. Se le reconoce que en la zona que fue de su dominio, implantó principios comunales gracias a una relación estrecha entre pueblo y soldados.

Doralicia Carmona: MEMORIA POLÍTICA DE MÉXICO.