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Autora: Doralicia Carmona Dávila.

© Derechos Reservados
ISBN 970-95193

Este Sitio es un proyecto personal y no recibe ni ha recibido financiamiento público o privado.

 
 

 


 


Mariano Paredes y Arrillaga asume el cargo de presidente de la República interino.

Enero 4 de 1846

Mariano Paredes y Arrillaga, nombrado el día anterior por la Junta de Notables, Presidente provisional de la República, toma posesión del gobierno.

El 14 de diciembre de 1845, Paredes, -experto en asonadas, levantamientos, golpes militares, etc.- estaba destacado en San Luis Potosí para organizar la tropa de la División del Norte del Ejército y marchar a la frontera para defender el territorio mexicano contra la invasión de Estados Unidos, pero se pronunció en contra del gobierno de José Joaquín Herrera y marchó mejor a la Ciudad de México.

El 29 de diciembre, Texas fue admitido como otra entidad de Estados Unidos; y, el 30, ocurrió la revolución de la Ciudadela, por la que el Ejército acantonado en la Ciudad de México se pronunció a favor de la rebelión de Paredes y Arrillaga, quien en lugar de marchar al frente, regresó el 2 de enero pasado para derrocar a Herrera al grito de “orden y monarquía”.

Al día siguiente Herrera fue depuesto, y como resultado de este hecho, hoy, Paredes y Arrillaga asume el poder.

Paredes pensaba que la mejor forma de salvar a México era convertirlo en una monarquía con un soberano español: Enrique de Borbón, primo y cuñado de la reina de España.

Pudo haber sido juzgado por traición a la Patria” escriben Villalpando y Rosas (Historia de México a través de sus gobernantes). “Paradójica situación: el presidente de una república se pronunciaba por un gobierno monárquico. Para lograrlo, Paredes convocó a un congreso constituyente que debía organizar el país bajo la forma monárquica de gobierno y en la convocatoria limitó el voto sólo a las personas que acreditaran disponer de recursos económicos.

Durante su gobierno, Yucatán declarará su independencia el 1º de enero de 1846 y su neutralidad en la guerra con los Estados Unidos; asimismo, comenzará la invasión norteamericana de la frontera norte y el ejército mexicano iniciará su retirada cada vez más en derrotada, pero Paredes se empecinará en creer que los norteamericanos no librarán una guerra por Texas.

Lo peor será que el próximo 12 de junio, al constituirse el nuevo Congreso, la Asamblea lo confirmará en el cargo y designará como vicepresidente a Nicolás Bravo. El 20 de junio siguiente, Paredes será nombrado comandante del ejército mexicano, pero su administración seguirá hasta el 28 de julio de 1846, cuando dejará el gobierno para salir a combatir a los norteamericanos. Nicolás Bravo lo sustituirá, pero el cinco de agosto, ambos serán destituidos por el general Mariano Salas para reimplantar el federalismo y el republicanismo.

Paredes será hecho prisionero, encerrado en un convento y desterrado a Francia.

José Mariano Epifanio Paredes y Arrillaga nació en la ciudad de México el 7 de enero de 1797. Hijo del español Francisco Xavier Paredes Fernández-Rochel (Oficial Mayor en el Ayuntamiento de México) y la mexicana María Josefa Arrillaga Larrión. Hizo sus estudios en su casa y en la Escuela Amiga. Se enroló como cadete del Regimiento de Infantería de México el 7 de enero de 1812. Durante la guerra de Independencia participó en 22 acciones contra la insurgencia. Fue arrestado por criticar y no mostrar lealtad a Fernando VII y ante la posibilidad de ser exiliado a España, se unió al Plan de Iguala.

Ya como parte del Ejército Trigarante, obtuvo una gran victoria cerca de la ciudad de Querétaro, que mereció que a su cuerpo de cazadores se le otorgara un escudo con el lema “30 contra 400”. Después tomó parte en varias asonadas, entre ellas: en 1823 contra el Imperio de Iturbide; en 1829 apoyó al Plan de Jalapa de Anastasio Bustamante contra Vicente Guerrero.

En 1832 fue ascendido a general de brigada. Fue brevemente secretario de Guerra en 1835. En 1839 participó en la represión del levantamiento federalista del 18 de mayo, en Jalisco, junto al gobernador Escobedo. Más tarde, en 1841, luchó contra el gobierno de Bustamante por no haber intentado la reconquista de Texas y sí haber cedido ante la agresión francesa.

Del 3 de noviembre de 1841 al 28 de enero de 1843, gobernó el estado de Jalisco y brevemente el Departamento de México. En octubre de ese año desconoció al presidente Santa Anna, y cuando el Congreso nombró presidente a José Joaquín de Herrera en 1845, Paredes se rebeló y tomó la capital para asumir hoy la presidencia.

Regresará a México en 1848 y se opondrá al Tratado de Guadalupe Hidalgo, mediante el cual cederá México más de la mitad de su territorio a los Estados Unidos. Junto con Manuel Doblado y el padre Celedonio Dómeco de Jarauta, armará una guerrilla para seguir combatiendo a los norteamericanos, pero será derrotado en Guanajuato  el 18 de julio del mismo año.

Volverá a exiliarse y regresará a México el año siguiente, acogiéndose a la amnistía general decretada, en donde morirá en la miseria, confinado en un convento,  el 7 de septiembre de 1849.

Doralicia Carmona. MEMORIA POLÍTICA DE MÉXICO