1818-1881
Nació en la ciudad de Puebla el 19 de febrero de 1818. Cursó en el Colegio de San Ildefonso la carrera de jurisprudencia, pero no obtuvo el título de abogado por su rechazo a los conocimientos no sujetos a comprobación. Estudió química en el Colegio de Minería y pasó después a la Escuela de Medicina. Sirvió en el cuerpo médico militar en ocasión de la guerra contra Estados Unidos. Meses más tarde se fue a París. En Francia se encontró con Pedro Contreras Elizalde (que sería yerno de Juárez), quien lo puso en contacto con Augusto Comte, que había iniciado en marzo de 1849 el “Curso de filosofía sobre la historia general de la humanidad.” De hecho, asistió a las conferencias de Comte en el Palais Royal. En 1851, una vez que obtuvo el diploma de doctor en la Escuela de Medicina, regresó a México
En 1854 enseñó física médica, y en 1855, historia natural y anatomía. Entre 1863 y 1867, durante el Segundo Imperio y en la lucha de los liberales contra la intervención de Napoleón III, cambió su residencia a Guanajuato, en donde ejerció su profesión de médico y profundizó en sus estudios acerca de la doctrina positivista.
A la derrota del Imperio, el 16 de septiembre de 1867, Barreda pronunció en Guanajuato una oración cívica a la República. Tras ello fue llamado por Benito Juárez para que formara parte de la comisión encargada de redactar un plan de reorganización educativa. Además de Barreda, en esa comisión se encontraban Pedro Contreras Elizalde, Ignacio Alvarado, Francisco Díaz Covarrubias y Eulalio María Ortega. En esa comisión, Barreda destacó, según dijo Agustín Aragón. Concluidos los trabajos, fue el 2 de diciembre cuando se publicó la ley que orientaba y reglamentaba la instrucción en México, desde la primaria hasta la profesional, incluyendo la preparatoria. La ley implantó la enseñanza elemental obligatoria y gratuita, eliminó la instrucción religiosa y trató de erradicar la ignorancia, conciliando la libertad con la concordia y el progreso con el orden. Asimismo establecía un plan de estudios para la educación secundaria, y además ordenaba la creación de la Escuela Secundaria para Señoritas.
Consecuencia de esta disposición fue también la Escuela Nacional Preparatoria, que inició sus labores el 1° de febrero de 1868, conforme al plan de estudios redactado por Barreda y bajo la dirección de éste, que conservó hasta 1878. A esta escuela la consideraba el más sólido cimiento de la enseñanza superior, por lo que se organizaron los planes de estudio con el propósito de atender las asignaturas de cultura general que prepararan sólidamente a los futuros profesionales para su ingreso en las escuelas de enseñanza superior. Todo el plan se apoyaba en una enseñanza científica en la que la ciencia y sus aplicaciones permitieran reformar a la sociedad. Para Barreda “la libertad, el orden y el progreso no podrán existir en México mientras los hombres sigan explicándose mágicamente el universo”.
El fondo filosófico de la reforma era el positivismo. Juárez pensó que en la propuesta educativa de Barreda podía encontrar el instrumento adecuado para concluir con la era de desorden y la anarquía en la que hasta entonces había vivido la nación mexicana. El orden era un imperativo para el país; para que ese orden fuera permanente, era menester que los mexicanos tuviesen conciencia de su necesidad; no bastaba un orden material, un orden mantenido con las armas, sino que se necesitaba de un orden que tuviese su base en la conciencia de los individuos; era menester un orden espiritual.
Sin embargo, la ley promovida por Barreda pronto tuvo sus enemigos, principalmente entre el clero y entre algunos liberales. Por ello, para lograr pasar sus ideas entre los liberales opositores, Barreda tuvo que tender un puente para facilitarles el tránsito de sus ideas a las ideas del orden positivista. Por ello hizo una adaptación de la doctrina de Comte para conciliarla con el punto de vista liberal de la historia: de esa forma, el espíritu positivo encarnaba en las fuerzas de la revolución y el espíritu negativo en las fuerzas del clero y el militarismo.
Dentro de la Escuela Nacional Preparatoria, el propio Barreda impartió la clase de lógica y siguió enseñando patología general en la Escuela de Medicina. También fundó la Sociedad Metodófila.
En 1878 Díaz lo nombró ministro en Berlín y poco tiempo después de su regreso a México, murió en la capital, en Tacubaya, el 10 de marzo de 1881.
Sus ideas inspiraron a sus discípulos la formación del Partido Científico.
Doralicia Carmona: MEMORIA POLÍTICA DE MÉXICO.
Efeméride. Nacimiento 19 de febrero de 1818. Muerte 10 de marzo de 1881.
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